El mejor jugador de baloncesto español de la
historia no pudo ver, ni tan siquiera por televisión, a su gran amigo Rafael
Nadal disputar la última final del torneo de Roland Garros que se adjudicó. Resultó
extraño porque siempre que Nadal juega una final, Pau es un fijo en las
gradas apoyándole. Sin embargo, pese a estar de vacaciones, el mayor de los Gasol ese día prefirió acudir en Canadá a una conferencia de Robin Sharma. Y es que el de Sant Boi no se cansa de repetir que para él es
vital aprovechar las vacaciones para intentar mejorar como jugador y como
persona.